El pan para celíacos
Elaborado con
harinas de cereales sin gluten, como la de maíz, de arroz y de trigo
sarraceno, es apto para personas con intolerancia al gluten
- Por MAITE ZUDAIRE (revista Eroski)
El
pan, en la cultura gastronómica de nuestro país, es un alimento que no
puede faltar como acompañamiento de las comidas. Pero en su elaboración
tradicional, con harina de trigo, quienes tienen celiaquía
no pueden consumirlo. Estas personas sólo pueden comer panes o masas
especiales que tratan de emular al alimento, elaboradas con una mezcla
de harinas sin gluten, por lo general, de arroz y de maíz. Esta
circunstancia favorece que su forma sea a menudo diferente, ya que al
carecer de gluten, la masa no sube, por lo que en general son planos y
compactos.
La enfermedad celíaca es una intolerancia al gluten, una proteína presente en el trigo, la cebada, el centeno, la avena y el triticale -híbrido de trigo y de centeno-. Las personas afectadas no pueden consumir ningún alimento que contenga estos cereales o que se haya elaborado en contacto con alguno de ellos porque les resultan tóxicos. El pan es un ejemplo, de ahí que recurran a variedades libres de gluten.
La enfermedad celíaca es una intolerancia al gluten, una proteína presente en el trigo, la cebada, el centeno, la avena y el triticale -híbrido de trigo y de centeno-. Las personas afectadas no pueden consumir ningún alimento que contenga estos cereales o que se haya elaborado en contacto con alguno de ellos porque les resultan tóxicos. El pan es un ejemplo, de ahí que recurran a variedades libres de gluten.
Panes sin gluten
El gluten es el responsable de la intolerancia que se manifiesta, sobre
todo, con síntomas digestivos. Los componentes tóxicos son las
fracciones de la proteína del gluten denominadas prolaminas. Cada cereal
contiene un tipo de prolaminas que resulta dañina para el celíaco: la
gliadina en el trigo, la hordeína en la cebada, la secalina en el
centeno y la avenina en la avena. Sin embargo, las del maíz (zeína) y
las del arroz (orizenina) no causan tal efecto.
Estos dos cereales se emplean para la elaboración de los panes y las
masas aptas para personas celíacas. La harina de maíz tiene un
inconveniente, al carecer de la capacidad de ser panificable. Por este
motivo, se mezcla con harina de arroz para poder obtener el producto
deseado. Sin embargo, puesto que carecen de gluten, que es la sustancia
que confiere elasticidad a la masa, estos panes tienen una consistencia
más plana y más compacta que el resto.
El maíz y el arroz son los dos cereales que se emplean para la elaboración de los panes y las masas aptas para personas celíacas
En los últimos años, la innovación en ciencia y tecnología de los
alimentos ha conseguido la elaboración de nuevos panes sin gluten.
Muchos de ellos se obtienen mediante la mezcla de harinas de maíz o de
arroz con otras de cereales aptos, como el trigo sarraceno, o de
leguminosas como la soja. La esponjosidad se consigue con la adición de
la levadura adecuada y de diversos aditivos gasificantes, espesantes y
emulsionantes.
Desde el Centro Especial de Investigación de Tecnología de los Alimentos (CeRPTA) de la Universitat Autònoma de Barcelona, consiguieron fabricar pan con un 0% de gluten. El valor añadido de este alimento para celíacos parece estar en el "sabor similar al pan elaborado con harina de trigo, una textura similar, una miga esponjosa y volumen normal, con un sabor personalizado que lo diferencie de los productos" convencionales. Además, los expertos usaron ingredientes exclusivos de origen animal, lo cual permite el consumo de este tipo de pan por parte de personas con intolerancia a la lactosa y al huevo.
Desde el Centro Especial de Investigación de Tecnología de los Alimentos (CeRPTA) de la Universitat Autònoma de Barcelona, consiguieron fabricar pan con un 0% de gluten. El valor añadido de este alimento para celíacos parece estar en el "sabor similar al pan elaborado con harina de trigo, una textura similar, una miga esponjosa y volumen normal, con un sabor personalizado que lo diferencie de los productos" convencionales. Además, los expertos usaron ingredientes exclusivos de origen animal, lo cual permite el consumo de este tipo de pan por parte de personas con intolerancia a la lactosa y al huevo.
Más recientes son los resultados de otra investigación realizada también
en España sobre un pan sin gluten, que llega desde el Consejo Superior
de Investigaciones Científicas (CSIC). En este caso, la elaboración
partió de harina de arroz enriquecida en proteínas y, según explican los
autores, "supera las limitaciones de textura y sabor que caracterizan a
los productos sin gluten por su corteza crujiente y miga elástica, con
un perfil energético y nutritivo semejante a los panes tradicionales".
Con respecto a los panes sin gluten que no se venden envasados, es
conveniente adquirirlos en las panaderías recomendadas por las asociaciones
regionales de celíacos. El motivo es que la elaboración de un pan sin
gluten en una panadería que trabaja con harinas de cereales "con gluten"
conlleva un alto riesgo de contaminación del producto final. Además, no
siempre es puro, ya que algunos fabricantes obtienen la harina de maíz o
de arroz en molinos que se han empleado también para la molienda de
cereales con gluten, con la consiguiente contaminación cruzada.De elaboración casera
Con la nueva normativa que regula los alimentos sin gluten, se establece el límite que debe figurar en la composición y el etiquetado de todos los alimentos para considerarse aptos. Por ello, la compra de estos productos sin gluten es ahora más segura que hace unos años. Incluso se puede elaborar este pan en casa, si se emplean harinas especiales de venta en panaderías, supermercados y tiendas especializadas.
Para la elaboración del pan sirve la siguiente fórmula:
1- Mezclar 650 gramos de harina de maíz y 1 kilogramo de harina de arroz.
2- Añadir a la mezcla anterior medio kilo de tapioca.
También se necesitará agua, levadura sin gluten y sal. Para su
elaboración, hay que poner agua tibia en el recipiente donde se vaya a
preparar la masa. Se añade la levadura al agua y, poco a poco, se
adiciona la mezcla de harinas tamizadas sin dejar de batir, junto con la
sal. Tras este proceso, se da forma a la masa y se coloca en una
bandeja de horno embadurnada con un poco de harina. Con el horno
precalentado con antelación, se hornea la masa hasta que esté dorada.
PRODUCTOS MÁS CAROS
PRODUCTOS MÁS CAROS
Un estudio comparativo de precios elaborado por la Asociación de
Celíacos de Cataluña refleja que los productos aptos para celíacos son
desde un 67% más caros que el resto. Este trabajo compara, entre los
años 2006 y 2010, los precios de productos básicos sin gluten -cereales,
panes, arroces y pastas- que deben consumir las personas enfermas
debido a su intolerancia al gluten. En el estudio quedan reflejados los
productos que más han aumentado su precio en los últimos años, entre
ellos, el pan, las pizzas, el pan tostado y las barritas de cereales.
Fuente:http://www.consumer.es/web/es/alimentacion/aprender_a_comer_bien/alimentos_a_debate/2006/05/11/151867.php
Fuente:http://www.consumer.es/web/es/alimentacion/aprender_a_comer_bien/alimentos_a_debate/2006/05/11/151867.php
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