Una alteración genética da lugar a que el migrañoso sea muy vulnerable respecto a varios agentes endógenos o patógenos.
Los factores precipitantes son muy variados y no necesariamente compartidos por todos los que sufren migraña. Influyen tanto situaciones de tipo físico, como biológico o psicológico.
Complementariamente al tratamiento del dolor, el cual no pretende ser un tratamiento curativo, existe una variada gama de fármacos y nuevos medicamentos antimigrañosos. Pero el objetivo de todos ellos es espaciar las crisis y disminuir su intensidad. Reconociendo que los factores que desencadenan la migraña en una persona no tienen porqué coincidir con los desencadenantes de otro migrañoso, es necesaria una adecuada analítica personal de los factores desencadenantes.
El conocimiento de los factores que desencadenan a cada paciente su migraña, permite controlar desde la raíz la enfermedad y minimizar sus efectos.
Generalmente, son factores reconocidos como desencadenantes:
a.- La alimentación
Para nosotros, el factor determinante es la alimentación. Sin embargo no lo es desde el simple punto de vista de recomendar una buena dieta de manera genérica o desde la eliminación de una lista tópica de alimentos, sino que la migraña debe entenderse y tratarse como síntoma de una posible intolerancia alimentaria.
No es válido hablar de una lista de alimentos intolerables por el migrañoso, ni tampoco es válido recomendar dietas limitativas para el migrañoso. La intolerancia alimentaria debe analizarse personalmente en cada paciente. En tal caso, nuestra experiencia nos dice que la migraña puede reducirse de manera relevante.
La migraña se inicia por la presencia de histamina en una zona anatómica o varias, y se perpetua por la presencia de serotonina.
Hay dos mecanismos bien conocidos que explican el cúmulo de histamina:
A) Porque es liberada del interior de las células bien por un mecanismo alérgico o no alérgico y el agente causal es una proteina alimentaria. Si se detecta el alimento, se evita la liberación de histamina y se evitan los síntomas al mismo tiempo que se borran de la memoria inmunológica la respuesta anómala.
B) Por un síndrome de histaminosis enteral.
La histamina es una molécula vital (imprescindible para la vida) tanto en animales como en vegetales así como en microorganismos (hongos, levaduras. etc) . Este carácter vital hace que esté presente en todos los productos alimentarios aunque en distintas proporciones de unas especies a otras y de unas zonas anatómicas a otras dentro del mismo organismo.
La enzima diaminooxidasa es capaz de neutralizar la histamina de los alimentos por metilacion, lo cual hace que cambie su tamaño y forma tan sabiamente que ya no cabe en su receptor y por tanto no puede activar el terminal nervioso del receptor .
Algunos fármacos inhiben el trabajo de la diaminoxidasa y entonces esta enzima ya no es capaz de desactivar la histamina alimentaria y por tanto se coma lo que se coma se desencadenan síntomas. Los productos fermentados y los curados tienen mucha histamina por tanto son mas perniciosos, pero también los fármacos tienen su propia escala de peligrosidad como agentes inhibidores de la diaminooxidasa.
¿Cómo podemos afrontar este problema?
Vía 1.- Suprimir en la medida de lo posible el consumo de fármacos.
Vía 2.- Tomar una dieta con alimentos pobres en histamina.
Por regla general se puede usar un plan que contemple las dos cosas, minimizar el consumo de fármacos y utilizar una dieta durante una o dos semanas muy restrictiva en histamina y, una vez superado el trance, ir abriendo la dieta . Todo esto junto con la eliminación de los alimentos positivos.
Cualquier fármaco antimigrañoso trata de bloquear alguno de estos mecanismos intermedios.
b.- El ayuno
Se ha demostrado que el ayuno provoca migraña.
c.- Trastornos del sueño
Los trastornos en el sueño, especialmente por falta de rutina horaria, es también un factor desencadenante muy común, siendo sin embargo una variable que tras el conocimiento puede controlar el paciente de migraña. Es bueno acostarse cada día a una hora similar y dormir las mismas horas cada día.
d.- Los hábitos de vida
El migrañoso suele ser persona muy activa, lo que conlleva que ciertos hábitos de vida se alteren por el ritmo de vida. En la medida de lo posible el migrañoso ha de intentar incorporar cierta rutina y evitar los desordenes.
e.- Estrés Muy ligado al punto anterior, el estrés es un desencadenante muy argumentado entre los migrañosos. Pero probablemente sea también un factor variable que el paciente puede controlar.
f.- Trastornos hormonales
Tres cuartas partes de los pacientes de migraña son mujeres y en ellas, los transtornos hormonales son un factor desencadenante predominante. Los cambios de los niveles de hormonas durante la menstruación y ovulación desencadenan episodios migrañosos. De hecho en la migraña infantil, la proporción entre niño y niña migrañoso, es similar. También se equilibra la proporcionalidad en la población migrañosa tras la menopausia.
g.- Cambios atmosféricos
La presión atmosférica suele ser un factor aludido por los migrañosos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario